Ya sé que todos y cada uno de los fotógrafos tenemos ciertas manías y gustos que nos hace diferentes y únicos.

Ya hace un tiempo me enamoré a primera vista de ésta mamá y fue INEVITABLE no ponerme a disparar sin sentido.

Pocas veces me sucede pero fue un flechazo directamente al Clic de la cámara, nos divertimos, disfrutamos y captamos unos grandes momentos a la puesta de sol de mi pueblo algo irrepetible…. Espero que os gustes estos detalles de esa tarde grabada a fuego en el recuerdo